La instalación para las Fiestas de Gracia, tiene como nombre “Resilencia” y está inspirada en los elementos de la cultura oriental, desconstruidos, y lo que supone socialmente de que China sea una nueva potencia mundial emergente.
Con esta instalación, pretendo alzar un grito a la sociedad del S.XXI, en la que tras haber sufrido mucho en los últimos años por una pandemia mundial se ha encerrado en sí misma y no es capaz de ver los retrocesos que acontecen a los derechos esenciales de las mujeres. Se ha acentuado el abismo, que durante tanto tiempo se ha trabajado por reducir, entre los hombres y las mujeres. Tras la pandemia, ellas, que un alto porcentaje ocupan cargos en la atención a la salud y que así mismo, también se encargan en una mayor porcentaje al cuidado de las personas y las familias, éstas han sufrido económica, laboral y emocionalmente.
Con Resilencia, pedimos parar un momento y mirar a nuestro alrededor. Buscar los caminos ya creados tiempo atrás y retomar las acciones por la la igualdad.
Un aspecto, que importa mucho en la esencia de la instalación artística, son los materiales utilizados. La obra está compuesta de de materiales orgánicos. Las estructuras circulares que enredan los árboles están hechas de cartón, papel, aluminio y corcho. La mezcla de texturas genera una diversidad en la vida de los árboles. Las formas con volumen que visten las fachadas de la calle están echas con libros, revistas, periódicos prensados y deformados. Cerrando la obra, tenemos el elemento principal de la instalación, el techo de tela roja y las escaleras que ascienden a la superficie superior. Son telas orgánicas rojas de las que caen tubos y escalones de cartón.